(El mosaico muestra a Cristo acogiendo a su madre y a otras seis mujeres de las que hace referencia el Antiguo Testamento)
Fue destruida por los persas en el 614 y reconstruida por los cruzados, llamándola Nuestra Señora de Sión, e incorporando en ella el Cenáculo. Aunque fue destruida en el 1219 y los turcos la convirtieron en mezquita, de ahí que hubiera tantos símbolos islámicos en el Cenáculo, que luego veremos.
A través de una escalinata, pasamos a la cripta venerada como la casa de María después de la resurrección y el lugar de su fallecimiento. En el centro hay una bella estatua de María, durmiendo, hecha de madera de cerezo y marfil.
Es un sitio en el que se respira quietud y paz, recordando sensaciones vividas el primer día en la casa de María.
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