lunes, 26 de abril de 2010

DIA 5: JERUSALÉM (VÍA DOLOROSA: OCTAVA ESTACIÓN)

JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES QUE LLORAN POR ÉL. El final estaba cerca, sabía que le quedaban pocas horas de vida, pero no quería que llorasen por Él, quería que viésemos en nuestro interior y lloremos por nosotros mismos...
Cuántas veces, ante una persona que está en situación terminal por alguna enfermedad, hemos llorado por esa persona y nos ha dicho, no llores por mí, no me tengas pena. En esos momentos la persona que sufre se muestra más fuerte que el resto...

No hay comentarios: